Una
de las cosas que primero vi en mi temprana edad, y que me llamó poderosamente
la atención, fue una bicicleta de Rafael, uno de mis hermanos mayores. De
manera que a partir de ese momento convencí a mi madre para que me comprara una,
y así lo hizo. Para los reyes Magos recibí un velocípedo. Cuando mis hermanos
salieron del pueblo a continuar los estudios en otras latitudes yo quedé en
poder de la bicicleta. Fue de mucha utilidad porque casi todo mi trabajo en Arismendi
lo hacía en ella, ya fuera para ir al conuco a buscar el pan, o al monte en
busca de leña.
Recuerdo
que en esa bicicleta visité el Fundo “El Gadín”, a unos 45 kilómetros de
Arismendi, muy cerca de Guadarrama. Recorrí además en mi juventud los caminos
de Totumal y La Aguada, y más allá, incansablemente. Un día también a mí me
tocó salir del pueblo, a estudiar. Con una beca que me dieron en el Liceo “Fermín
Toro” de Valencia —donde saqué el bachillerato—, compré una bicicleta de
semi-carrera. Con ella andando llegué hasta El Baúl, saliendo del barrio “La
Castrera” de Valencia, a mediados de diciembre de 1982, tras recorrer 213
kilómetros durante una mañana y un parte de la tarde.
En
el 2006 compré una moto Suzuki en Pedraza, la cual conservo todavía. Con ella
he recorrido mundo, sólo que ahora la tengo en Valencia para hacer diligencias
(más) en los perímetros de mi residencia. En una ocasión que visitaba el
municipio “Guacara” me encontré con una Alcabala atendida por policías. Yo que
andaba apresurado quise adelantar un auto lujoso, entonces un agente me detuvo
con un movimiento de mano; me dio un consejo rápido pero que me ayudó a ser más
comedido.
—Señor,
tenga cuidado de no tropezar o rayar uno de esos carros, porque la moto no le
va a alcanzar para reparar el daño.
—Le
agradezco el consejo —dije, dándole el paso al carro lujoso.
*
Les
recomiendo a mis amigos del mundo visitar la página Web de “La Fundación
Mundial para las Ciencias Naturales”: www.naturalscience.org/es
Mi
segundo Blog: cronicasdearismendi.blogspot.com
Y
como un regalo especial los remito al artículo: “Una Brújula Moral para el Viaje de la Vida”.
Domingo,
8-06-2019
Zordy
Rivero, Cronista
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