domingo, 31 de mayo de 2009

PELIGROS DEL USO DE LAS PLANTAS MEDICINALES EN NIÑOS

A mediados de la década de los años 90 del siglo pasado ocurrió en la ciudad de Valencia un hecho que conmocionó a la sociedad entera. Una lactante que no llegaba a los seis meses de edad fue llevada por la madre a un médico de la ciudad, presentando una diarrea aguda. El galeno, después de revisar a la niña le mandó un antibiótico y suero de rehidratación oral, además de las recomendaciones dietéticas y de observación por si aparecían nuevos síntomas.

Tres días más tarde la niña moría y era ingresada a la morgue del hospital Central de Valencia, donde se le practicó la autopsia. Esta reveló muerte por insuficiencia renal aguda. En el transcurso de tres días los riñones habían dejado de funcionar sin un motivo aparente o justificable. Se descartó la deshidratación, porque en ningún momento llegó a tal extremo. Se citó al médico que la vio por primera vez, y ante una junta médica se determinó que la dosificación del antibiótico se correspondía con el peso y edad de la pequeña paciente. No se observaron signos que pudieran hacer pensar en una posible alergia o un shock anafiláctico.

Ante la ausencia de toda evidencia, el médico fue inculpado, pero sin argumentos suficientes para ser juzgado y encarcelado -como era la pretensión de los padres de la niña y de otros sujetos cercanos a la familia-, quienes veían en el profesional una amenaza para la sociedad. Ocurrió lo que reza el conocido refrán: del árbol caído todos quieren hacer leña.

Al final vino la salvación para el médico, quien en ese momento era investigado por la policía del Estado. A un miembro del departamento de toxicología del mismo hospital se le ocurrió realizar un examen toxicológico, poco antes de que el cuerpo fuera sepultado. El examen reveló la presencia en sangre y tejidos de una sustancia llamada Tanino, un veneno que se encuentra en algunas plantas supuestamente medicinales. En ese instante la investigación de la policía se orientó hacia los familiares de la infortunada. Confesaron que una vecina le había dado de beber a la enfermita un guarapo hervido de Palotal, para que se le parara la diarrea. Esta planta tiene un alto contenido de tanino, causante directo de la muerte de la niña.


Zordy Rivero

viernes, 29 de mayo de 2009

BIENVENIDOS AL LLANO VENEZOLANO

A partir de los días venideros les iré informando sobre distintos tópicos de la vida del Llano; sus creencias, mitos y leyendas. Hablaremos de las costumbres del llanero; sus picardías e ingenuidades. Les aseguro que va a ser una experiencia única. También les daremos a conocer sus paisajes, gentes, fauna, flora silvestre y sitios turísticos, haciendo referencia especial al Llano Arismendeño.

Zordy Rivero

miércoles, 27 de mayo de 2009

VIDA SALUDABLE

¡Cuidado con la Sábila Casera!

En nuestras comunidades se le considera a la Sábila como una panacea: la planta que lo cura todo. Y tiene mucho de cierta ésta aseveración. No obstante, es bueno aclarar que existen unas trescientas especies distribuidas por todo el planeta, siendo la más conocida la Aloe vera, Aloe barbadensis o también llamada Aloe vulgaris. Sólo un botánico experimentado sería capaz de diferenciar una especie de la otra. Mi recomendación es que se le dé a la sábila un uso externo, donde se obtienen excelentes resultados, especialmente en las quemaduras de piel de primer grado, causadas por el sol y el agua caliente. Que ¿cómo lo logra? A través de sus propiedades antibacterianas, antivirales, antimicóticas y de regeneración tisular, facilitadas por sus componentes enzimáticos, vitamínicos, además de muchos minerales. El ejemplo más demostrativo lo tenemos en el Maestro Jesús, quien después de haber sido bajado de la cruz, pasada las cinco de la tarde, le masajearon su cuerpo magullado y sangrante con sábila y mirra, y luego lo envolvieron en una túnica... que lo devolvió a la vida al tercer día.

Por desconocimiento o ignorancia, o por el consejo apurado de algún chamarrero no autorizado, que tanto abundan en los pueblos llaneros, hay pacientes que ingieren el cristal de sábila licuado por tiempo prolongado, sin saber que a través de dicho jarabe están metiendo en su organismo un alto contenido de látex, iodo y otras sustancias tóxicas o no medicinales. La consecuencia principal es que el remedio termina siendo peor que la enfermedad. Uno de los primeros síntomas es la pérdida de peso en el paciente: Enflaquece de manera continua y visible; los latidos del corazón se aceleran significativamente, aun en reposo. Muchos órganos internos y glándulas se alteran, mostrado un mal funcionamiento, y en especial la tiroides, quien es la que más sufre por el iodo de la sábila.

Actualmente existen laboratorios en países avanzados que envasan el jugo de sábila después de extraerle las sustancias tóxicas. Lo recomiendo confiadamente para el tratamiento de la úlceras estomacales y gastroduodenales. Muy buena para los constipados. También se consiguen presentaciones en cápsulas. Ya saben, la sábila cultivada en los patios de las casas démosle un uso exclusivo externo. Y para obtener una buena presentación en jarabe o capsula, preguntemos por la procedencia y registro sanitario del laboratorio que la procesa.
Arismendi, 27-05-2009
Zordy Rivero