martes, 11 de julio de 2023

DIARIO DE SUIZA 12

Noviembre 2022

Lunes 7

Hoy ha sido un día soleado en la ciudad. Al contrario de los otros días el cielo ha estado despejado y luminoso. Hoy por primera vez, la secretaria de Paul, Monika Waldmann no ha solicitado mi ayuda. He pasado toda la mañana escribiendo, o mejor, transcribiendo la conferencia del Dr. Sebastian Hausmann. He tenido cierta dificultad porque la misma es muy técnica y poco entendible para el común de la gente. Incluso los traductores presentaban bastante dificultad en seguir el hilo de la conferencia. Podría decir que es una conferencia para un nivel superior o universitario. Así que avanzo lentamente, tratando de hacerla más entendible y aprovechable.

El almuerzo de hoy: arroz con atún, queso palmesano, salchichas curadas, y como agregado, pan con mantequilla. Mientras servíamos la comida, Paul me preguntó si yo había visitado el Lago de Maracaibo, y yo con pena y todo tuve que decirle que no. Él se extrañó. Le dije que teníamos un viaje planificado para visitar Maracaibo, pero que todavía no lo habíamos logrado. Y sobre el mismo tema le dije que los marabinos son personas que poseen mucha energía, que los hace muy activos e incansables, y no se explican por qué sucede eso. Paul sólo sonrió.

Media hora después Paul salía a dar un paseo con Kimo; al pasar por mi frente le dije que si podía acompañarlo y él respondió que sí. Ya antes me había invitado a hacer ese recorrido y yo me negué. No sabía lo que me perdía. Hicimos el recorrido de al menos dos kilómetros, entre ida y vuelta. Caminamos paralelo a un manantial de aguas cristalinas, con la presencia de ganado pastando a los alrededores, con sus campanas sonoras adheridas al cuello.

Paul me dijo que un tiempo atrás sintió dolor en las coyunturas, sobre todo en las rodillas y cintura; fue al médico y este le recomendó que hiciera ejercicios de estiramiento y caminatas diarias por las montañas. Lo ha hecho y le ha funcionado, porque ya no siente dolor. Todo esto me lo dijo en inglés y lo entendí perfectamente.

Kimo se antojó en meterse al riachuelo, olió el agua, pero no bebió. “Es lo mismo de siempre, entra y sale sin tomar”, dijo Paul con una sonrisa de aceptación. Le pregunté si el agua era bebible y me dijo que no era muy limpia. Entonces entendí a Kimo. Luego se antojó de hacer su necesidad y al terminar, Paul sacó su bolsita roja y recogió la caca. A unos 20 metros la colocó en un cesto de basura. Señaló los árboles y dijo que ya estaban soltando sus hojas y que en pleno invierno estarían completamente desnudos. De regreso vi una plantación de manzanas pero sin manzanas. Unas cinco hectáreas en total. Regresamos ya con nuestros cuerpos más calientes. Lo importante de estas caminatas es no respirar por la boca para que los pulmones no se enfríen, evitando así que algunas bacterias se vuelvan agresivas ante un cambio de temperatura de su hábitat.

Por la tarde Monika me pidió que la ayudara a organizar unos archivos de los invitados al Congreso. Me aparté del escritorio y me dispuse a realizar el nuevo trabajo.

Zordy Rivero