El sábado 22 de junio viajé a Caracas en compañía de mis
amigos Víctor Montemayor y Cesar Ríos, para asistir a un Seminario sobre Las Flores de Bach impartido por el
Ingeniero Eduardo González, quien a la vez, en compañía de Orietta Palenzuela,
Plinio Urpin y Adriana Gallardo nos facilitaron el traslado y permanencia en la
ciudad capital —sin cuya asistencia, difícilmente habríamos podido acudir a tan
inolvidable cita. Al igual que nosotros, ellos pertenecen a La Fundación Mundial Para las Ciencias
Naturales, la cual difunde (a través de sus afiliados, que ya suman miles
en todo el mundo) los conocimientos científicos más avanzados sobre las Ciencias Naturales, puesta al servicio de un mundo agobiado por tanta
información interesada y manipulada, que sólo contribuye a crear mayor
confusión, sin aportar nada nuevo para el bienestar general. También nuestro
agradecimiento a María Victoria, la hija de Eduardo González, quien ayudó en la
traducción del inglés de algunos textos relacionados con la materia en
cuestión.
El Seminario empezó a las 9 de la mañana y en general fue
muy dinámico; apenas se dio inicio, cada asistente se levantó y dijo su nombre
y el motivo o interés en aprender sobre una medicina Alternativa, que a la vez
es muy eficaz y no causa daño orgánico, a pesar de la cantidad que se use. Es
decir, no tiene efectos adversos o secundarios. Después, en la medida en que
avanzaba la exposición se hicieron preguntas y aclaratorias que contribuyeron a
obtener experiencias ajenas pero muy instructivas y gratificantes.
Este Seminario es la continuación de la primera parte,
y algunas de las perlitas de sabiduría que allí destilaron las compartiré ahora
con ustedes, mis preciados lectores, y todo comienza con una pregunta de ¿por
qué se produce la enfermedad?
• La enfermedad comienza contigo y termina contigo.
• El miedo a enfermar es lo que hace que la gente
enferme, y esto puede llegar hasta el pánico, que no es más que una falta de Fe
en nuestro Creador.
• La enfermedad se expresa a través de los
pensamientos y sentimientos imperfectos: odio, envidia, chismes, venganza,
arrogancia, intolerancia etc.; y la perfección se expresa a través de los
pensamientos virtuosos que nos acercan al amor y por tanto a Dios y Su Voluntad
Divina. Entonces, la enfermedad es una creación imperfecta del ser humano que está
relacionada con lo que pensamos.
• Lo que tu aceptas como verdad es tu Consciencia; y de lo que hagamos en el
presente determinará nuestro futuro.
• Al ser nosotros hijos de Dios llevamos dentro esa
perfección, sólo que todavía, en la mayoría, no se ha manifestado. Salmos 82:6: Yo les he dicho: “Ustedes son dioses; todos
ustedes son hijos del Altísimo”.
• Todas las personas poseen en su interior un sanador
muy poderoso. Y siendo Jesús un Sanador por excelencia lo dijo así, Juan 14:12: “Ciertamente les aseguro
que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y aun las hará
mayores”.
Después de las 12 m se concedió hora y media de receso.
Al ingresar a la sala nuevamente, se procedió con Las 38 Flores de Bach más la
de Rescate. Explicando sus propiedades y formas de uso, y sobre la cual no me
extenderé, ya que existe una amplia bibliografía que se puede consultar hasta
familiarizarse con ellas.
Para los interesados en estos Seminarios comunicarse
con mi correo electrónico: zordycrivero@hotmail.com También poseemos libros sobre
Las Flores de Bach que se les puede hacer llegar si los piden oportunamente, a través del correo.
Finalmente, en muchas farmacias de la mayoría de las
ciudades del país se consiguen estas medicinas milagrosas, que nos alejarán del
médico y los hospitales, permitiéndonos llevar una vida saludable y productiva.
*
Les recomiendo a mis amigos del mundo visitar la
página Web de “La Fundación Mundial para las Ciencias Naturales”: www.naturalscience.org/es
Mi segundo Blog: cronicasdearismendi.blogspot.com
Y como un regalo especial los remito al artículo: “Una Brújula Moral para el Viaje de la
Vida”.
Jueves, 27-06-2019
Zordy Rivero, Cronista