Miércoles 26
Mi rutina de la mañana: Me despierto a las cinco y de inmediato
agradezco a Dios por mi vida; también agradezco a mi Cuerpo Elemental y a mi
Cristo Interno; luego me entrego a la meditación que incluye protección de
personas y lugares, curaciones de mis pacientes lejanos, reafirmación
(visualizaciones) de mis proyectos de vida para el bien del Planeta Tierra y
sus habitantes. A las seis empiezo a realizar mis ejercicios de respiración que
ocupan unos veinte minutos. Finalmente hago unas veinte flexiones de pecho y luego
me dirijo al baño. Me llamó la atención que la familia Probst usa solamente
crema dental sin flúor, y este hecho me parece importante para la salud
en general, sabiendo que el flúor es un veneno que se utiliza en la
construcción de cohetes que viajan al espacio, y que a nivel orgánico puede inhibir
o dañar glándulas de secreción interna.
A eso de las 6:30 ya me estoy vistiendo y dirigiendo mis pasos a la
cocina, a hacer mi desayuno que ya está listo, esperándome en la mesa. Los dos
primeros días Elisabeth me llamaba para el desayuno, pero después ya no lo
siguió haciendo. Entiendo que al igual que su esposo, ella, a su manera, enseña
con el ejemplo.
Zordy Rivero