miércoles, 29 de noviembre de 2023

DIARIO DE SUIZA 19

Noviembre 2022

Martes 15

En horas de la mañana María Alejandra y Lukas me llevaron al aeropuerto de Zúrich. Hice escala en Madrid, y tomando el avión hacia Caracas llegué a Maiquetía en horas de la tarde. Me esperaba mi amigo Juan Dueñas quien me llevó al terminal de “La Bandera”. Cayendo la noche me encontraba en Valencia, al lado de mi familia, dándole gracias a Dios por tan exitoso viaje.  

Zordy C. Rivero

jueves, 16 de noviembre de 2023

DIARIO DE SUIZA 18

Noviembre 2022

Domingo 13

Temprano desayuné un yogurt y pan con miel en casa de María Alejandra y Lukas. Después de las 8 de la mañana nos dirigimos a un bosque cercano. Allí nos encontramos con tres jóvenes: Saskia, Lea y Athena. Lukas, que había salido temprano de la casa, regresó por nosotros acompañado de Micah, un jovencito de unos 12 años.

Entramos en lo profundo de un bosque privado, donde se cortan y siembran arboles de manera regular y donde Lukas es parte de esa empresa. En el bosque no se ven zonas despobladas, ni vacíos por la ausencia de árboles. El mismo gobierno regula el corte, y esto ayuda a preservar los manantiales y la humedad, a la vez que permite a las especies que habitan en él, conservar su hábitat natural. Lukas nos mostró un árbol agujereado por pájaros carpinteros, y otro gigante, quizás centenario marcado con un triangulo que indicaba que no podría ser cortado, pues viviría hasta que el tiempo lo indicara.

Ya en la montaña caminamos un trayecto de unos 500 metros hasta llegar a un sitio donde habían hecho una fogata. Le agregamos carbón, encendimos fuego y pusimos a cocinar unas salchichas que traíamos en una cava. Después de comer me permitieron hablarles a los jóvenes, y reunidos alrededor de la fogata hice una breve presentación. María Alejandra me sirvió de traductora.

Cuentan que a la India acudió un hombre deseoso de encontrar un Maestro que lo pudiera guiar por el camino espiritual, pues estaba cansado de ser un buscador sin obtener lo que deseaba. Los lugareños le indicaron y guiaron hacia un Maestro que lo podía ayudar. Al ser presentado el buscador le pidió al sabio que le enseñara el camino de la iluminación.

¿De dónde vienes? —preguntó el anciano sabio.

—Vengo de Occidente y confío en que usted me pueda enseñar.

—Yo podría enseñarte, pero primero tienes que vaciarte.

—No entiendo, maestro.

Tienes que vaciarte de viejas e inútiles costumbres, conocimientos obsoletos, conceptos radicales, prejuicios, creencias falsas, hábitos perjudiciales

¡Ahora sí entiendo!

¡Me alegra que lo entiendas! Es como si desearas que te llenara una taza de café que está llena; lo más probables es que se derrame y el café nuevo no tenga cabida ni posibilidad de desplazar el viejo.

Cuando el hombre decide liberarse de las viejas ataduras, las enseñanzas del Maestro irán creando una nueva conciencia, de manera que según su dedicación y disciplina, un día empezarás a emitir una luz que se hará más fuerte y poderosa. Entonces, cuando el estudiante se convierta en un ejemplo para su prójimo, esa luz pura y cristalina jamás le abandonará.

Zordy Rivero