sábado, 14 de mayo de 2011

VIDA SALUDABLE

Síndrome del Debilitamiento Progresivo 

En mi práctica médica he notado en un amplio grupo de pacientes un debilitamiento progresivo, que en muchos casos llega al estado de postración. Inicialmente pensaba que era debido al exceso de trabajo, a una inadecuada alimentación, insomnio, preocupaciones, mal manejo del estrés, o parasitosis intestinal. No obstante, tras corregir los supuestos desordenes, los pacientes seguían igual, y a veces hasta empeoraban. Un día empecé a interrogar sobre algunas drogas farmacológicas que pudieran estar tomando, y para mi sorpresa, la mayoría consumía algún medicamento prescrito por un médico, que le ayudaba a controlar la tensión arterial elevada, la diabetes, una infección bacteriana, etc. Lo cierto es que la mayoría consumía drogas durante todo el año.

Normalmente, después de cumplir su función, el medicamento es degradado por el hígado; una parte se excreta con la bilis y a través de los riñones; otra se fija en la grasa corporal, y el resto sigue circulando en forma de desechos o basura orgánica, afectando tejidos, órganos y glándulas. Estos desechos pueden pasar un año y más alterando el organismo, modificando sus funciones, hasta que finalmente el mismo cuerpo logra deshacerse de ellos. Existen personas que por alguna enfermedad crónica tienen que consumir día tras días, drogas durante todo el año. En el caso en que los tratamientos son múltiples, las consecuencias a largo plazo pueden ser catastróficas. Incluso se han observados casos de cirrosis hepáticas o lesiones renales de origen medicamentoso. De ahí viene el conocido refrán: es peor el remedio que la enfermedad.

Sin embargo existe una esperanza, y está comprendida dentro de la medicina naturista. Tomar el adaptógeno Ginseng Siberiano, una cápsula cada mañana por tres meses, al menos dos veces al año, y los Depurativos que contengan Zarzaparrilla. Estos componentes naturales fortalecen el hígado, ayudando a purificar y liberar la sangre de tanto desecho inútil. Por lo regular vemos un paciente que se recupera satisfactoriamente, que se vuelve hasta cierto modo hiperactivo, con deseos de realizar tareas para las cuales antes no tenía ánimo ni voluntad. Ocurre algo muy llamativo y es la desaparición del mal humor, o estado de ánimo recalcitrante. Para su información final, por si no lo sabían: El origen del cáncer está en el debilitamiento de la sangre.

Arismendi, 14-05-2011
Zordy Rivero

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